Desde 1886, el Primero de Mayo se celebra en varios países del mundo el Día del Trabajador, en memoria de los obreros ejecutados ese año en los Estados Unidos, tras el reclamo de reivindicaciones laborales.
Conocidos como "los mártires de Chicago" y dirigidos por Albert Parsons, 80 mil empleados protestaban, en aquella época, por una reducción en la jornada laboral a 8 horas diarias. Pronto, se sumaron a esa demanda 350 mil trabajadores de toda la Unión Americana y, así, el reclamo se transformó en una huelga nacional que afectó a más de mil fábricas.
A la lucha, se sumaron los anarquistas y el 4 de mayo, en el punto más álgido de la disputa, un grupo de sindicalistas que protestaba fueron ejecutados en lo que, más tarde, se conoció como la Revuelta de Haymarket. La fuerza demostrada en aquel entonces por los obreros marcó un antes y después en la historia laboral.
En la Argentina, el Día del Trabajador se conmemora desde fines de SXIX. El primer acto se realizó en 1890, en el Prado Español de Buenos Aires, y contó con la participación de numerosos movimientos obreros, integrados en su mayoría por inmigrantes alemanes, italianos, españoles y portugueses.
Y, desde que Juan Domingo Perón llegó a la presidencia en 1946, el Día del Trabajador alcanzó una notable importancia, organizándose celebraciones multitudinarias en todo el país. Entre las diversas manifestaciones de la época, se destaca la convocatoria de los obreros en la Plaza de Mayo, quienes llegaban en multitud desde temprano para escuchar el discurso del presidente Perón.
Fuente : Telefe Noticias